Como todos los años, durante los primeros días del mes de mayo recibimos el paquete de cada padrino con ropa de invierno y calzado para su ahijado. Los padrinos prepararon sus envíos personalizados tomando en cuenta las medidas que relevó el equipo de la fundación, las necesidades para este invierno y todo lo que saben de los chicos. Como siempre, el envío fue acompañado de una carta en la que el vínculo se sigue fortaleciendo.
Una vez que tuvimos todos los paquetes en nuestra sede, contamos con la colaboración de padrinos voluntarios para controlar que todos los chicos tuvieran su envío y dejar todo embalado en las mejores condiciones para ser enviado a El Soberbio.
El 15 de mayo realizamos el envío de 115 cajas y gracias al apoyo de la comunidad educativa de la Escuela Rural 856, días después, cada uno de los chicos recibió su paquete con lo que prepararon especialmente sus padrinos.
Las fotos que recibimos del momento de recepción de los envíos nos alegraron mucho y saber que van a tener lo necesario para estar abrigados en el envío es la mejor gratificación por el trabajo realizado.
Ahora, esperamos ansiosos las cartas de respuesta de los chicos, mientras seguimos trabajando en todos los proyectos que nos propusimos para este año.